Lágrimas en la lluvia
18 de marzo, 2022
Segunda entrada. Qué día para ello. Boca amordazada. Manos atadas. Ver y oír todo sin poder hacer nada. Zugzwang. El cíborg más fuerte... qué maldita broma.
Tuve que cortar la charla del profesor y yo. Casi se dijeron demasiadas cosas que no se podían retirar. No es que él me lo echara en cara. ¿Cómo podría hacerlo? Más bien, he empezado a ver que a menudo los errores que cometemos nos pesan más que a nadie. ¿Cuánto tiempo ha pasado desde que pensé así? ¿El búnker? ¿La matanza? Tal vez incluso antes del reclutamiento. La debilidad que fue tallada fuera de mí. Sin embargo, nunca fuera de él. ¿Cómo se mantuvo durante tanto tiempo, tan blando y vulnerable?
La casa ha caído en silencio, dejando un eco ensordecedor a su paso. Cada uno lidia con las cosas a su manera, supongo. Han encontrado consuelo el uno en el otro y por eso me alegro. Él ladrón está siendo extra travieso, dándole al policía muchas maneras de distraerse y él psíquico está actuando como defensor y persecutor según sea necesario. ¿Por qué no? Puede ver exactamente cómo equilibrar la balanza y mantener el juego del gato y el cachorro todo el tiempo que sea necesario.
Nuestro último día juntos había tenido un sabor tan dulce, pero ahora se convierte en el vinagre más amargo. Él lo habría sabido. Me mantuvo distraído y entretenido. Como un niño. Un niño que no puede moverse. Ahora él sabe cuál será mi próximo paso, si es que alguna vez doy uno. ¿Le diré que en realidad nunca me fui y que sólo subí a la azotea? Si es así, sabe que estoy escuchando atentamente a través de los espacios huecos mientras decido en qué colina quiero morir.
Ver la cuenta atrás del reloj en tiempo real es una experiencia tan surrealista. Los preciosos recuerdos que podrían haber sido se pierden ahora por el incesante vuelo de la flecha del tiempo. ¿Debo decirles a todos la verdad? ¿Es mejor mentir hasta el final o verlo todo venir? Si continúo sin hacer nada, me espera una perdición segura. Hacer algo trae su propio apocalipsis personal.
Zugzwang. ...Está lloviendo.
Fulgur Ovid fuera.
